Porto Pí es en estos días conocido por albergar uno de los centros comerciales más importantes de toda la isla de Mallorca. Hoy en día, las personas se desplazan al Centro Comercial Porto Pí para ir de tiendas, hacer la compra de la semana o del mes, tomar algo o comer e incluso ir al cine o jugar una partida de bolos. El centro comercial Porto Pí se ha convertido en los últimos 20 años en un centro de reunión para jóvenes y adultos, con una oferta muy amplia para ocio y diversión.
Variedad de estilos en cuanto a tiendas de moda y complementos, comida y tiendas para niños y mayores hacen de este centro un lugar concurrido durante toda la semana.
Éstos son algunos de los establecimientos más populares del recinto.
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Multicines
Porto Pi - Terrazas |
CASINO MALLORCA |
CENTRO
COMERCIAL PORTO PI |
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Pero no siempre Porto Pí fue un barrio así de comercial...
HISTORIA DE UN BARRIO :
La legendaria aviadora neozelandesa Jean Batten residió y murió
anónimamente en el barrio de Portopí
De aquel Portopí idílico que también conoció
el Arxiduc Lluís Salvador -pues en su rada tuvieron su anclaje
sus yates, el Nixe I y el Nixe II-, en donde dominaban una serie de torres
de familias palmesanas veraneantes, apenas queda nada. También
desapareció la factoría de abonos químicos de los
hermanos Ripoll y La Pedrea, lugar de juegos de la chiquillería.
De la época en que Antoni Maura presidió el Consejo de Ministros,
quedó la factoría de Petróleos de Portopí,
que tras reconvertirse en Campsa, pasó a denominarse CLH. Varios
de sus depósitos desaparecieron, para mayor seguridad de la Familia
Real, inquilina vacacional de Marivent. Complejo al que se unieron Son
Vent y Son Ventet.
Las antiguas crónicas del reino de Mallorca no ignoran los inicios
romanos de Portopí, como rada de refugio. La defensa de su cala
se encomendó a una serie de torres, que en el siglo XIV eran cuatro.
Actualmente queda la situada en la Estación Naval de Portopí
y otra más reducida, junto a Ses Rafaeletes. Esta última
salvada hace unos años de la ruina, por puro milagro.
Los armoniosos y bellos chalés de veraneo que dominaron la zona
entre finales del siglo XIX hasta hace unos cuarenta años, quedaron
en cuadro. Unos cuantos, debido a la Guerra Civil, fueron confiscados
por la Marina de Guerra. Otros desaparecieron para dar paso a edificios
de muchas alturas, convertidos actualmente en colmenas de apartamentos.
En una de aquellas torres coquetonas, situadas muy cerca del mar, estaba
Can Darder, que acogió la primera sede del Laboratorio Oceanográfico, que fundó Odón de Buey.
Hasta que veraneantes y, posteriormente factorías químicas
y petrolíferas, se instalasen en Portopí, los pescadores
y algún que otro contrabandista fueron los reyes del lugar, durante
bastantes generaciones. Siempre a la sombra del castillo de San Carlos,
una de las mejores fortalezas militares portuarias del Mediterráneo.
Sus murallas y protección artillera, durante 350 años, fueron
un seguro para Palma de Mallorca y su población. Gracias al castillo de San
Carlos, hoy importante museo militar, fallaron varias invasiones turcas,
británicas, francesas y republicanas.
Los habitantes de Portopí, en su inmensa mayoría, desconocen
que durante casi veinte años, hasta 1982, fecha de su muerte, en
los apartamentos Vista Mar residió Jean Batten. Fue una neozelandesa
mundialmente famosa, que en la época de las grandes travesías
aéreas oceánicas, consiguió batir récords,
a bordo de su biplano Percival Gull. Por desconocimiento, fue enterrada
en la fosa común del cementerio de Palma. Como ella, otros extranjeros,
algunos muy conocidos, también eligieron Portopí para vivir
y morir.